Soy una maestra de Educación Infantil que adora leer, escribir, el teatro y todo el universo de la infancia.
Crecí rodeada de cuentos, y cuando aprendí el significado de las letras empecé a escribir mis propias historias.
Pienso que los cuentos son la mejor forma de mostrarles el mundo a los niños, porque les enseñan y sobre todo, les divierten. Y la infancia es lo más valioso que tenemos.
La habitación de Miguel Ángel comenzó como un proyecto de clase, pero pronto sentí la necesidad de mostrárselo al mundo. Solo necesitaba una mano amiga para atreverme a hacerlo, y aquí está mi sueño cumplido.
He escrito más cuentos de los que soy capaz de recordar, pero aún mi pluma tiene tinta para muchas historias más.